MUCHAS PRESIONES PARA PERMITIR EL MATRIMONIO HOMOSEXUAL

lunes, 21 de marzo de 2011

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Existe una presión por legalizar los matrimonios del mismo sexo en los países donde todavía no se ha aprobado esta aberración, detrás de estos movimientos existen organizaciones y gobiernos que tienen muchos intereses oscuros. Los  motivos son muchos, políticos, electorales y yo diría que hasta diabólico, porque detrás de todo esto el demonio tiene sus manos  metidas.

Recientemente el presidente de los Estados Unidos ha dicho que limitar el matrimonio a las parejas del mismo sexo es inconstitucional. Hoy día se habla de redefinir el matrimonio, sin embargo los católicos de verdad sabemos que el matrimonio fue establecido por Dios, y quiso que fuera entre un hombre y una mujer. “Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó, varón y mujer los creó” (Gn 1,27) y luego  los bendijo y les dijo que sean “fecundos”, esta fecundidad no puede darse entre dos personas del mismo sexo si no entre un hombre y una mujer.
El legalizar el matrimonio homosexual trae una serie de consecuencias negativas para la sociedad, la cual debe permanecer con los ojos bien abiertos y a la luz de la Palabra de Dios defender este precioso sacramento. Un ejemplo de lo negativo y perverso que estas uniones pueden ser, es el caso de Canadá entre otros,  donde en el 2005 se aprobó dichas uniones y actualmente se está desarrollando un proceso legal en la Columbia Británica para decidir si se legaliza la poligamia.
No quiero citar mil citas bíblicas acerca de los beneficios y el mandato  que Dios  nos dijo, sin embargo el Señor se dirigió a Moisés y le dijo “No te acuestes  con un hombre como si te acostaras con una mujer. Este es un acto infame” (Lv 19,22), también recordemos el pasaje de Sodoma y Gomorra cuando los hombres de estas ciudades querían acostarse con los dos hombres (Ángeles) que visitaron a Lot, el cual les dijo “Por favor, amigos míos, no vayan hacer una  cosa tan perversa” (Gn 19,5-6). Estas mismas palabras Dios nos las dice también. No se trata de derechos, se trata de una desviación que el hombre quiere seguir y pasar por encima  sobre el plan establecido de Dios desde el momento de la creación que tiene para el hombre y la mujer.

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1 comentarios:

  1. Jose Palaciosmarzo 21, 2011

    Buen comentario hermano, asi es el matrimonio es entre un hombre y una mujer. Defendamos este sacramento.

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