Bienaventurados
los que tienen hambre y sed de justicia porque serán saciados (Mt 5,6; Lc 6,21).
La
diferencia entre la formulación de Mateo y Lucas es grande, Mateo con la
añadidura "de justicia" quiere indicar que se trata de un hambre
metafórica.
Lucas
en cambio, habla del hambre en sentido ordinario.
Hambre
y sed en la Biblia indica frecuentemente el deseo de los bienes sobrenaturales
(Am 8,11; Is 55,1; Jr 31,25), que Dios satisfará plenamente.
La
felicidad del mundo futuro será d e los
pobres, es decir, de aquellos que han sido privados de los placeres de la buena
vida que en este mundo procura la riqueza. Es una especie de compensación.
Sin
embargo el hambre y la sed deben ser sufridas por causa del Reino de Dios.
El
sufrimiento en este mundo será temporal, la gloria futura no tendrá
comparación, es por ello que en algunas etapas de la vida de muchos
sufrimientos, es preciso afrontarlas con serenidad y en la esperanza que
tendremos una vida mejor al lado de alguien que nos ama hasta el extremo.
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