Sólo Lucas y Marcos recogen escuetamente la vuelta de
los apóstoles de su misión y la invitación que Cristo les hace de retirarse con
Él a un lugar desierto para descansar, no sólo de su correría apostólica, sino
del incesante venir de gentes a Cristo (Mc). Y, “embarcándose,” vinieron cerca
de Betsaida (Lc). Lc no trae la “segunda multiplicación” de los panes, que
traen Mt-Mc. ¿No estaba en su “fuente,” a la que en esta sección siguen tan de
cerca Mt-Mc? ¿Lo consideró un “duplicado”? Una confrontación de las narraciones
de ambas multiplicaciones en Mt-Mc y su amplio contexto, da lo siguiente. Allí
se da su valoración.
Primera
multiplicación (Mt c.14 y 15; Mc c.6 y 7).
1. 5.000
alimentados
2. Travesía
del lago
3. Desembarco
en Genesaret
4. Controversia
con los fariseos
5.
Diálogo
— las migajas de pan — con la mujer sirofenisa
6. Curación
de un sordomudo
Segunda
multiplicación (Mt c.15 y 16; Mc c.8).
1. 4.000
alimentados
2. Travesía
del lago
3. Desembarco
en Dalmanuta
4. Controversia
con los fariseos
5.
Diálogo
sobre los milagros del pan con los discípulos
6.
Curación
de un ciego. (Falta este paralelo estructural en Mt).
En este pasaje se da comienzo la “gran omisión” de
Lucas frente al texto de Marcos. Lucas suprime toda la sección de Mc 6,45-8,26,
compuesta de nueve perícopas independientes. Que Lucas lo tenía en su ejemplar
de Marcos es cosa segura, después de lo dicho sobre la indicación topográfica
de 9,10. Hay que concluir, por tanto, que lo suprimió intencionadamente. Los
motivos para ello han sido evidentemente más de uno, en primer lugar el
principio de la economía. Lucas no quería que sobrepasara su obra el límite de
una extensión determinada. Para ganar espacio para el abundante material en
frases y discursos de Jesús de que el evangelista disponía a partir de otras
fuentes, suprimió del texto de Marcos, junto con otras perícopas aisladas, una
sección entera de mayor extensión. El hecho de que haya sido precisamente ésta
la elegida, se explica al examinar el contenido de las diversas perícopas que
la com-ponen, de las que, sin excepción, pueden encontrarse paralelos más o
menos cercanos en otros pasajes, o podían parecer al evangelista poco
apropiadas para sus lectores. También podría concederse cierto valor
significativo a la observación de que sea Betsaida el escenario del primero y el
último de los episodios de la sección omitida. Se puede decir, por tanto, que
Lucas ha omitido un viaje de Jesús con su punto de partida y de retorno en
Betsaida. Por la omisión de Mc 7,24-37 queda además suprimido el viaje de Jesús
a territorio gentil. Con ello queda salvaguardada «la unidad de lugar»,
Galilea, para la primera parte del Evangelio de Lucas (4,14-9,50).
CURIOSIDADES PARA CLARIFICAR EL TEXTO
Las
Comidas: Las comidas no tenían lugar
generalmente fuera del área de los pueblos y ciudades, pues se pensaba que en
tales lugares reinaba el caos. Tampoco eran lugares donde se pudiesen observar
escrupulosamente las normas de pureza relativas a la manipulación y preparación
de los alimentos. Una muchedumbre de cinco mil hombres era mayor que la
población de casi todas las principales ciudades de la región.
El Milagro
en el AT: La multiplicación de los
panes hace recordar el milagro que Dios hizo al proveer Maná para Israel en el
desierto, y especialmente la multiplicación de los alimentos por Eliseo (2 Re
4,42-44 donde también sobó comida.
¿Qué quiso
decir Jesús cuando les dijo a los apóstoles “Denle ustedes de comer” (Lc
9,13)?: 1. Jesús quiere decir que
estos hombres no deben deshacerse tan pronto de su responsabilidad. Según los
Evangelios los presentan, ellos con frecuencia estaban muy dispuestos a hacer
exactamente eso, y decir: “Despide a la gente” (aquí en el v. 12); “Despídela
(a la mujer sirofenicia)” (Mt 15,23). Hasta reprendieron a los que trajeron los
niños pequeños a Jesús para que los tocase (Lc. 18,15), parecía ser demasiadas
veces el lema de ellos. A la luz de esta evidencia, se puede decir sin temor de
equivocarse que Jesús quiere recordar a estos hombres su responsabilidad y que
el deshacerse de la gente que esta necesitada no es una solución. Ciertamente
ese no es la manera divina de hacer las cosas (Mt 5,43-48; 11,25-30; Lc
6,27-38; Jn 3,16).
2. El quiere que ellos pidan, busquen y llamen (Mt.
7,7-8)
3. En vista del hecho de que “pan”, según se usa la
palabra en este relato (ver vv. 13, 16), aunque ciertamente se refiere a lo que
satisface una necesidad física, es también un símbolo de Jesús como el Pan de
Vida (Jn. 6,35.48), ¿no les está diciendo también a estos “pescadores de
hombres” que ellos deben ser el medio en la mano de Dios para satisfacer las
necesidades espirituales de la gente?.
ACTUALIZACIÓN
Jesús
multiplica los panes y les da de comer a la gran multitud, que eran más de
cinco mil. Increíble imaginarse el atractivo que tenia Jesús al predicar, todos
permanecían expectantes a su Palabra, aun cuando no la comprendían en su
totalidad.
Cuando
Dios se revela en nuestras vidas lo simbolizo como el mar y el vaso, es decir,
el mar representa su sabiduría revelada al hombre y el vaso representa el
entendimiento del hombre que quiere abarcarlo todo y no puede, se desborda. Es
necesario digerir poco a poco lo que nos quiere mostrar, a la primera decimos
que comprendemos el camino de Dios, yo siempre le digo que ese es un pequeñito
paso, Dios siempre quiere más de nosotros.
Gravemente
nuestra Iglesia nos ha enseñado más a pedirle a Dios que a conocerlo, decimos que
amamos a dios pero es mentira, no puede amarse lo que no se conoce, es a través
de su Palabra donde esta revelado todo su amor.
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