DECÁLOGO DEL ANIMADOR DE LA PALABRA

Para ser Animador de la Palabra de Dios debes desarrollar una serie de hábitos que a continuación presento para que verifiques cual cumples de los diez.

1.      Tener hábito de la lectura de la Palabra de Dios.

2.      Dedicar tiempo y perseverancia a crecer en una vida de oración y una oración inserta en la vida.

3.      Desarrollar la capacidad de silencio, de escucha y apertura.

4.      Mantener un sano entusiasmo por saber más, estudiar, prepararse y capacitarse.

5.      Crecer en la humildad, la cual es la escalera al cielo y reconocerse instrumento en las manos de Dios y dejarse guiar por Él.

6.      Motivar la participación, dar la Palabra, invitar al dialogo.

7.      Actualizar el mensaje de la Palabra, descubrir su fuerza transformadora.

8.      Crear lazos comunitarios, consolidar el grupo, construir la comunión.

9.      Tener conciencia, práctica y audacia misionera.

10. Brindar apoyo, acompañar, dar fuerza, animar a los demás.

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