En un escueto comunicado, el Vaticano confirmó el miércoles haber recibido el día anterior una respuesta escrita del obispo Bernard Fellay, jefe de los lefebvrianos, al requerimiento de aceptar explícitamente el "Preámbulo doctrinal” exigido para su regreso a la unión con Roma. Si bien Benedicto XVI levantó en el 2009 la excomunión impuesta por Juan Pablo II en 1988 a los cuatro obispos lefebvrianos, tanto ellos como sus seguidores siguen sin estar unidos a la Santa Sede.
Como lo dijimos un tiempo atrás en
nuestro Blog, las conversaciones iban en buen camino y se esperaba pronto
buenas noticias, así lo manifestamos en nuestro twiter (@ orlys75).
El “Preámbulo doctrinal”, que ninguna
de las dos partes ha dado todavía a conocer, es un documento de dos páginas que
contiene la profesión de fe requerida para asumir cargos eclesiásticos, con la
expresa mención de aceptar el magisterio ordinario del Papa y los obispos, y no
solo el que se presenta de modo solemne como dogma de fe. Los lefebvrianos
rechazan elementos importantes del Concilio Vaticano II como el ecumenismo, el
dialogo interreligioso y la colegialidad episcopal.
El Vaticano precisó que el texto de
respuesta de monseñor Bernard Fellay “será examinado por la Congregación de la
Doctrina de la Fe y, a continuación, sometido al juicio del Santo Padre”. En
circunstancias ordinarias este proceso suele requerir algunas semanas.
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