¿SOLAMENTE LA FE ES NECESARIA PARA NUESTRA SALVACIÓN?

martes, 8 de mayo de 2012

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Para responder esta pregunta es necesario leer en su totalidad la Palabra de Dios. No debemos limitarnos solamente a unos pocos versículos de la Biblia mientras que ignoramos otros. Lo cierto del caso es que “Dios quiere que todos los hombres se salven  y lleguen al conocimiento de la verdad” 1 Tim 2,4.

El termino verdad viene del gr. “alèzeia” que significa “estar oculto para”, designa la realidad desvelada, el ser subsistente puede ser conocido. Dios se ha dado a conocer a través de su Hijo, Él es la verdad revelada.

La Iglesia Católica siempre ha afirmado que Jesús ha ganado nuestra salvación con los meritos de su Pasión. Los esfuerzos del hombre siempre son insuficientes pero necesarios.

El mensaje de Jesús desde el inicio de su vida pública fue “conviértanse, porque el Reino de los Cielos está cerca” Mt 4,17. Conversión viene del gr. “metanoia” que se traduce como cambio de mentalidad, vuelta a Dios. Eso es lo que Jesús quiere que todos lo sigan para llegar a Dios ya que Él  es “El camino, la verdad y la vida, nadie va al padre sino por mí” Jn 14,6.


Para seguir a Jesús es necesario tener fe, la cual “Es un don gratuito que Dios hace al hombre y la cual puede perderse. Para vivir, crecer y perseverar hasta el fin en la fe debemos alimentarla con la Palabra de Dios y debemos pedir al Señor que la aumente” CIC 162.


Llegados a este punto cabe preguntarnos entonces ¿Es necesaria solamente la fe para nuestra salvación?


El apóstol Pablo dice al respecto que “la persona es hecha justa por la fe” Rom 3,28. El pasaje es uno de los más controversiales que ha tenido nuestra Iglesia con las sectas y otras denominaciones. Para ellos “Solo la fe basta”. La palabra “solo” fue añadida por Lutero ya que en el texto griego original no aparece.


En otro pasaje el mismo Pablo parece ratificar lo que ha dicho en Romanos, pero es importante ver el contexto del mismo “nadie se convierte en justo por cumplir la Ley, sino por la fe que trae Cristo Jesús” Gal 2,16. El apóstol habla de las obras de la Ley que eran requeridas en el Antiguo Testamento, especialmente la circuncisión, que algunos judíos querían hacer requisitos para los cristianos. (cf. Rom 2,25; 2,29; 1 Co 7,19; Gal 5,11; 6,13; Ef 2,11; Flp 3,2-3).


Ahora bien el Concilio de Trento en el Capítulo VIII en la sesión VI celebrada el 13 de enero de 1547 dice que “El hombre se justifica por la fe”, pero que se debe entender el sentido que adoptó tal expresión, ya que la misma es “Principio de salvación del hombre, fundamento y raíz de toda justificación, y sin la cual es imposible hacerse agradable a Dios”. Por lo tanto se puede afirmar que la “sola fe de Lutero” es cierta en la medida en que no se opone la fe a la caridad del amor.


Pablo en varias cartas afirma la importancia de las obras al decir: “aunque tuviera tanta fe como para trasladar montes, si me falta el amor nada soy” 1 Co 13,2. En la segunda carta a los Corintios dice: “todos hemos de comparecer ante el tribunal de Cristo para recibir cada uno lo que ha merecido en la vida presente” 5,10.


Pablo enseña una fe que actúa, ya que la fe es una realidad que se vive y por lo tanto incluye obrar consecuentemente, por eso dice: “para los que están en Cristo Jesús ya no son ventajas el tener o no tener circuncisión; solamente vale la fe que actúa mediante el amor” Gal 5,6.


La fe nos hace salvos, pero solo cuando nuestro obrar está movido por el amor a Dios, por la obediencia a su Palabra: “porque no son justos ante Dios los que escuchan la Ley sino los que la cumplen” Rom 2,13.


La carta de Santiago escrita probablemente en el año 56 o 57 y en donde él mismo se nombra “servidor de Dios y de Cristo Jesús el Señor” St 1,1 explica bien claro  que si “la fe no produce obras, es que está muerta”.


En resumen, solo Cristo nos salva, pero es necesaria la fe que requiere una obediencia que produce obras. El mismo Jesús nos dijo: “no todo el que me diga Señor, Señor entrará en el Reino de los Cielos, sino el que haga la voluntad de mi Padre celestial” Mt 7,21.







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1 comentarios:

  1. Realmente muy lindo lo que escribes en este post, y es verdad que el quiere la salvacion de todos, felicitaciones por el blog orlando

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